Puerto Venecia... The paradise Parte I.

A puntito hemos estado de posponer lo de visitar Puerto Venecia para dentro de unos días... pero nos ha podido la curiosidad...  así que, después de un largo día nos hemos metido en el coche rumbo al nuevo Centro Comercial Puerto Venecia en Zaragoza.

Una interminable fila de coches que habían pensado lo mismo que nosotras, nos daba la bienvenida en la primera rotonda, pero confesaré que una impecable organización ha contribuido a que el tráfico fuera fluido y pudiéramos entrar en el parking principal sin ningún problema.

Aún no habíamos visto nada... ¡Y ya nos empezaba a gustar!

Aunque os contaremos mañana más extensamente, aquí van unas fotitos de nuestra primera visita  (os pedimos disculpas por la mala calidad, con la emoción y las prisas nos hemos olvidado la cámara en casa y hemos tenido que hacer uso del Iphone) ... no nos ha dado tiempo a más, nos han atendido tan bien en Rituals y L'Occitane (copa de cava incluida) que casi nos tienen que dar una patada en el trasero para que abandonáramos el establecimiento (si leéis esto:  gracias chicas, habéis sido encantadoras... pronto hablaremos en Sweet & Boogie!  de vuestra tienda y de todas esas maravillas que nos habéis recomendado... desde hoy somos fans vuestras)

Imágenes del exterior, en la zona de ocio y restauración:




 

Imagen cedida por Mónica Oy.


Imagen cedida por Mónica Oy.

Una parte (de las muchas zonas) de tiendas:



Bienvenidos a Neverland!  Un paraíso para los peques... y una cafetería preciosa... mañana añadiremos más fotos: 




Algunas de las firmas que brotan en Zaragoza (por fin...):

 


Desigual y su majestruosa tienda de dos plantas... cuando vayáis no os perdáis la deco del techo... (nunca pensé que reciclaje y glamour pudieran ir de la mano tan contentos...)


La decoración campestre de L'Occitane, tan perfectamente cuidada como siempre... y sus jabones, y perfumes naturales... son una maravilla.  La crema de manos más vendida del mundo está en esta tienda...:



Y Rituals... sus espumosos jabones nos vuelven locas... (pero hay mucho más, mucho, mucho, mucho más)



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